Hoy he tenido una mañana activa.
Un poco de remoloneo en la cama, por que negarlo, pero he desayunado y he ido a nadar. Poco tiempo, pero con ganas.
Al salir de la piscina he ido a los vestidores, y para amenizar la mañana, los han cambiado. Me he asomado al que entré la última vez que vine (como hace diez días) y por lo visto, el sexador de vestuarios, ha decidido que ahora sea de niñas. Por lo visto, mi despiste le ha sentado muy mal a la chica que se estaba duchando, y a la que no he visto ni la cara, pero me ha informado de manera un tanto brusca y desagradable con un:
-Joder tio, quins collons-
Yo estaba desnudo, duchándome de espaldas a ella, que a su vez, se encontraba de espaldas a mi. Sinceramente, de no ser por que al entrar al vestuario había un chaval dentro, habría dudado de si no la había vuelto a cagar. Pero con esa seguridad en mi interior, le he notificado en un postura poco ortodoxa, de espaldas a ella y girando el cuello para hablarle de “de cara” y le he informado de las recientes prácticas transexuales de los vestuarios.
-Perdona, creo que te has equivocado. Este es el vestuario de chicos-
Empezando tímido, pero acabando con una afirmación rotunda. Es decir, soy tímido pero esta vez no la he cagado yo...
Ella me ha mirado con cara dubitativa. Como si esto ya le hubiera pasado antes y no siempre se hubiera equivocado ella. Ha sacado la cabeza al pasillo, y ha admitido su derrota.
-Es verdad-
Yo, he asentido con la cabeza y una mueca rara que pretendía ser una sonrisa amable de compresión, pero claro en aquella postura ha salido lo que ha salido. Ella se ha vestido, ha recogido sus cosas y se ha despedido con un;
-Gracias-
¿Gracias Por que?
¿Por darle una información fiable?
¿Por ser amable? (a diferencia de MI informadora nudista)
¿Por qué ha visto en mi rostro que soy buena gente?
¿Por enseñarle el culo?
¿Por todo en general y nada en particular?
Y así, en ese mar de dudas me he ido a trabajar. Con dudas, pero limpio...