Piratas

Los Rolling Stones vuelven de bolos (aunque estos creo que nunca lo han dejado), Police vuelve a juntarse y se marca unos conciertillos, el Boss Springsteen, que antes venía por estos lares una vez cada diez años, y convertía el pasar dos noches haciendo cola en algo rentable si revendías tu entrada, ahora parece que vaya a empadronarse en alguna ciudad de España, y así podríamos seguir enumerando grupos y solistas que se han bajado del pedestal, y vuelven a dedicarse a eso de las giras…

¿La razón? Ya no viven como vivían de vender CD’s.

¿Volverán los Wham?

Es sintomático ver como al no tener necesidad, en general los músicos famosos se habían despegado del público en directo.
Uno que es envidioso y está cargado de maldad, se alegra de estas cosas y piensa “ya está bien, que se lo ganen” (que podría traducirse en un; “que se jodan”). Es más, yo soy de los que lo extrapolarían a otras profesiones de endiosados y divos.

Desde aquí propongo una plataforma en contra de estos colectivos, aplicando el mismo método que ha empujado a los músicos a fajarse. Pirateemos su trabajo.

Futbolistas: Voy a dedicarme a grabar partidos de domingueros, no de equipos de divisiones menores no, partidos de solteros contra casados, de cascaritas de barrio. La única condición es que la portería no sea una portería, si no unas mochilas o unos árboles. Luego los colgare en youtube, y a esperar. Pronto bajarán las audiencias televisivas y se devaluará su trabajo. Los futbolistas serán de nuevo personas ¡Por fin todos los niños querrán ser soldadores!

Políticos: Grabaré y colgaré en Internet discursos promesas y demás mensajes infumables. Prometeré cosas más molonas que las que prometen los de verdad. Si chicos, bajo mi mandato seremos expansionistas (conquistaremos Andorra), ganaremos un mundial, se trabajarán 20 horas semanales en jornada intensiva todo el año. Retiraré el IVA de preservativos, tampones (y compresas) y libros. Además si pierde tu equipo el fin de semana, el lunes fiesta y, por descontado, los periodos de regla serán de baja laboral. Esto no se si dará mucho resultado para jorobar a los políticos, pero solo imaginándomelo ya me abstraigo de la triste medianía actual.
(al fin y al cabo de lo que propongo lo único imposible es lo del mundial de fútbol)

Ejemplo de pirata político

Dejo en vuestras manos más alternativas, y evidentemente os llamo a colaborar.
Al fin y al cabo, yo soy solo una persona, ¡juntos somos poderosos!
(perdón, me he dejado el mode politico en on)

Libertad

Va a ser difícil, pero mi intención con este post, es no quedar como un salido.
¿Alguien acusaría de salido a Delacroix por como pintó a la libertad?
Una vez aclarado, prosigamos.

Un grupo de mujeres suecas reclama poder hacer "topless" en las piscinas
La campaña "Sólo son pechos" crea polémica y llega a la oficina del Ombudsman local .

No se lo que es un Ombudsman. Pero estoy seguro que aqui no lo tenemos (al menos como concepto). El norte de Europa viene a ser como el Japón de estos lares. Solo ellos son capaces de cosas así, tan “normales”, que son freaks.
Hoy en día vivimos una “escalada de derechos civiles” muy divertida. Los Monty Phyton lo parodiaron de un modo genial en la vida de Brian, cuando uno de los miembros del Partido Judaico Popular (¿o eran del Frente Popular de Judea?) exige su derecho como hombre a ser madre.

Y es que es cierto, ¿por que los hombres podemos lucir tetilla (con el agravante común de los pelos) y las mujeres deben taparse?
Cuestión cultural me direis. Claro, también es cultural tirar cabras de campanarios, o encender teas en los cuernos de algunos toros. La excusa de “lo cultural” cada vez cuela menos. A ver señores, ¿quién tiene el salero de explicar por que se puede hacer topless en la playa y no en la piscina?
Pero la reivindicación va más allá.

"Queremos que nuestros pechos sean tan normales y estén tan desprovistos de connotaciones sexuales como los del hombre." "Después de todo, sólo son pechos".
Éste es el grito de protesta de un grupo de 50 mujeres suecas que lleva dos meses haciendo campaña para poder hacer topless en las piscinas.

Ahí ya no estoy de acuerdo. No a la des-sexualuazación del pecho femenino ¡Me niego!
Es muy probable que mis hijos vivan en un mundo donde tengan que tomar omega-3, donde se puede pasar curso suspendiendo asignaturas, donde la gente sea “de color”. En definitiva un mundo lleno de inocentes “daños colaterales”, de usuarios y no clientes. Pero me niego a que crezcan en un mundo sin tetas.
¿Que harán actrices como Maribel Verdú si no pueden basar sus carreras en enseñar tetilla?
No imagino mi infancia sin la espera del final de aquel video de Sabrina. Se acabó que una Cicciolina pueda llegar al parlamento a base de dejarse besar los pechos en los mítines (esto será muy divertido de explicar a mis hijos).
¡No queridas suecas! Enseñad lo que queráis, pero no desconnoteis vuestros parabienes.
Y no, no os voy a defraudar, e aquí el famoso video.

(¿Que se habra hecho de esta chica?)

Mis 7 pecados

El ínclito Joan, tuvo a bien contagiarme un meme.
Se trata de definir tu relación con los siete pecados capitales. Seguiré el orden de Gregorio I el Magno, ya me conocéis soy un clasicote.

Lujuria
El reflejo de la lujuria en mi persona se concentra en mi mirada cada vez que entro en la fnac a principios de mes. De mis ojos salen cálidas miradas que invitan a los ipod touch a venirse conmigo a un rinconcito apartado. Hago morritos a algunos libros, dejándoles entender a las claras lo que les haría a solas en casa...
Si amigos, la lujuria se desata en mi al cruzar las puertas de la fnac. Estoy pendiente de comprobar la cara que pongo al entrar en un concesionario de Harley Davidson.

Gula
La gula tiene dos variantes, la dulce y la salada. Ante la primera me rindo cada vez que entro a una tienda de chuches. A mi no me deis chocolates caros, ni pasteles, enseñadme una bolsa de plástico preñada de gomitas y seré vuestro. Es mas, no voy al cine si no tienen tienda de chuches, y a los cines con chuches rancias tampoco.
La variante salada se deja ver en otra multinacional. En IKEA, si a mi en esas tiendas no me da solo por el consumismo (que también), a mi se me abre el apetito, oh señor, gracias por crear las patatas fritas sabor cebolla de IKEA (no hablo mas de ellas que babearé el teclado).

Avaricia
Soy avaro con las chuches. Odio a la gente que cuando hay que comprarlas dice “no, yo no como” y una vez empezada la película empieza a pedirte.
¡Si no querías chuches, no querías chuches! (ostia ya)

Pereza
La pereza es esa fuerza de gravedad aumentada que te impide levantarte de la cama a apagar la luz, o del sofá para cambiar de canal cuando se le acaban las pilas del mando. Yo queridos lectores, he llegado a tragarme Titanic en la tele, con tal de no levantarme en una noche fría. Un vistazo a mi barba, a mis melenas, o a mi expediente académico también sirve para ilustrar este pecado.

Ira
La ira en los felices principios de los noventa, se resumía en la sensación que tenías cuando descubrías que alguien había grabado algo encima de tu VHS con el unplugged de Pearl Jam. Hoy en día suelo expresarla a modo de “santoral satánico” cada vez que mi ordenador no pilla el wi-fi. La ira... esa eterna transformista.

Envidia
La envidia es el más camaleónico de mis pecados. Si veo a alguien con una bolsa de chuches mas grande que la mía, o con mas bolsas de patatas IKEA que yo en el maletero, puede que sienta un pellizco de envidia. Pero lo que de verdad me hunde, es ver a alguien con una Harley de las que me gustan.

Soberbia
Cada vez que alguien dice delante de mí que sabe hacer salsa de patatas bravas o romesco; sonrío, asiento levemente con la cabeza y, pienso...
“Si, seguro que sabes... iluso” (si me cae mal cambio el “iluso” por “imbécil”)
Creo que eso podría ser calificado de soberbia (solo por la gente que no haya probado mis respectivas salsas claro).

La siguiente ronda, me gustaría que la preparasen Esteve y Elena.

Espeso

Tengo la cabeza espesa, tener la nariz tan metida en un solo tema me alerda.

A mí alrededor no pasa gran cosa, y si voy mas allá, me da la impresión de no entender nada.

Voy al cine, y aparece el tonti-guapo de Beckham (ese que ha llevado el mito de la rubia tonta a otro nivel) pidiendo dineros para intentar encontrar a una niñita rubia sin culpa de nada, sobre la que se ha liado un culebrón impresionante. Pitote que no recuerdo por ningún otro desaparecido... Puede que por aquella Melody, pero me pilló chico y estas cosas me resbalaban.

Miro la tele y veo a 103 niños, morenitos todos ellos, a un tris de ser secuestrados por una ONG (si, si secuestrados, así es como se le llama al llevarte a alguien contra su voluntad)

¿Os he dicho que hace mucho que las ONG’s me revuelven la tripa?

Me quedo de piedra al ver al presidente de un país de aquello que llaman primer mundo, dice que irá al Chad a traer a todos los detenidos “hayan hecho lo que hayan hecho”. Me quedo patidifuso. Y me pregunto... imaginemos que arrestan al secuestrador (prefiero llamarlo así) de nuestra niña rubia y, resulta ser del Chad. ¿Que cara pondríamos los todomoralistas europeos si viene el presidente del dicho país a llevárselo digan lo que digan nuestros jueces?

Recuerdo hace no mucho las opiniones vociferantes de varios radioopinadores por que vino el presidente de Ecuador a pedir explicaciones sobre la famosa agresión racista del metro...
Que, por cierto, es gracioso que lo más grave sea el insulto racista y no los golpes. A mí que me llamen lo que quieran mientras no me toquen...

Pero no me hagáis caso, ya os digo que últimamente no entiendo casi nada, y ando espeso.