Porque el mundo es bonito, hasta vomitar.

23 diciembre 2006

Blocaire invisible

Debido a un problema técnico, no he podido colgar el post del “blocaire invisible” hasta hoy. Sorrys...

El sorteo dijo que mi blocaire, era azriel, el responsable del Microverso.

La verdad es que ha sido una sorpresa agradable, siguiéndolo estos días, he encontrado un blog personal, con sus toques de ironía y con la acidez justa (que se acentúa al hablar de la navidad… jejeje)

Si, Azriel no es amigo de la navidad. Es mas, yo diría después de seguirlo que daría positivo en una prueba anti-alérgica. Los porqués aquí y aquí.

Tal vez lo que más me ha gustado de su blog, es su lado políglota. Posts en catalán, castellano e inglés. Uno entiende esa vertiente idiomática en cuanto ve que Azriel es un amante de los viajes, que incluso podría ser guía turístico del aeropuerto JFK.

La cuestión es que poco a poco iba viendo similitudes con mis gustos, pero la señal definitiva fueron sus adicciones confesables. Si hay algo que defina mis últimos meses, es mi adicción (aun no declarada) a las series de televisión americanas. Ver que alguien es capaz de perderse en un anuncio de tele tienda, estar enganchado a una cámara digital, adorar a alguien como House, y defender las hamburguesas, hace que sienta cierta empatía, y que incluso me interese por descubrir si coincidimos en mas gustos (estoy buscando cosas de In Ticket), así que…

Votad a Azriel for president amics!

Y para acabar con el post, una canción, que como no, también compartimos...


17 diciembre 2006

Futboleando

Un partido de fútbol puede ser muchas cosas. Tiene sus detractores, lo sé, y seguramente estarán pensando que entre todas esas cosas, puede ser un coñazo.

Pero el fútbol en este post, es sólo una excusa, un vector.

El jueves pasado, se jugó un partido en Japón, entre dos equipos que a primera vista no tienen nada en común; el F.C. Barcelona, y el Club América de México. Son dos equipos con muchos seguidores, que creo que nunca habían enfrentado en competición oficial.

Cuando conoces a tu rival, en cualquier faceta de la vida, puedes personalizarlo. Así, siguiendo el tema futbolero, cuando tu equipo juega contra un rival conocido, piensas en tu jefe, amigos o familiares que lo apoyan. En el caso del partido del que os hablo, eso era difícil. Por que son dos aficiones que se desconocen. Los seguidores del América no saben que a los del Barça se nos acusa de victimistas, y los del Barça no saben, que a los del América, en México les llaman “putos”, por ser del América…



Lo que se seguro, es que en algún lugar de México, había un seguidor del America que pensaba en mí. Estoy seguro que en transcurso del partido se acordó de cuando nos escapamos del colegio a los 11 años, en una operación perfectamente estudiada, o de la vez que nos enfadamos, por que no me subió la nota en un examen que nos corregimos entre nosotros. De las horas del patio que pasamos en la secundaria, estudiando anatomía antes de un examen, de la vez que nos expulsaron del equipo de básquet por jugar un partido borrachos, y de mil historias más.

Yo pensé en el, y en como me gustaría habérmelo encontrado el viernes por la mañana en clase, para picarlo por el 4 a 0.

Y es que el futbol puede ser algo más, y para mi, con 11 años, fue la mejor manera de integrarme en un mundo totalmente diferente. Aún a costa de él que me llamase Butragueño...

Es de las personas que mas me jode haberles perdido la pista, y solo se que las cosas no le han ido tan bien como merecía.

Un abrazo Moisa.




PD: El pinche Cuauhtemoc es un naco, te pongas como te pongas…

15 diciembre 2006

Angeles del infierno

Tener una moto implica muchas cosas.

Para empezar en invierno te conviertes en algo parecido a una cebolla, capas y capas de aislantes, para no resfriarte. En mi caso no es por el resfrío en si, es mas bien por no tener que escuchar unos cuantos; “te lo dije, cómprate un coche” (jejeje).

No, a mi me gustan las motos, y no solo me compré una moto, me compré una moto custom.

Si, uno nunca se parece lo suficiente a James Dean… y decidí que mi camino era formar mi propia banda de “Ángeles del Infierno”. Así que cayó la moto, y como no tengo ni pajolera idea de mecánica de motos, me apunté a una web de usuarios del mismo modelo de moto. Gente muy maja y sobre todo solidaria, que con gran paciencia guían a jóvenes como yo, en su camino a convertirse en moteros duros y peligrosos como los de las películas.

Poco a poco he ido escalando metas hacia la cima de ser el jefe de una banda de peligrosos y respetados moteros (de esos que provocan que las madres, tapen los ojos a sus hijos cuando pasan). Y hace poco, fui a mi primera quedada motera…

Un domingo, a horas intempestivas de la mañana, nos reunimos en una gasolinera a las afueras de la ciudad. Niebla, mucha chupa de cuero y un frío del demonio…

Presentaciones, no quiero evitaros saber, lo divertido que es ver a un grupo de hombretones hechos y derechos (disfrazados de moteros) presentándose por los nicks (que además podéis imaginar como son los nicks de una web motera, el que menos es un “dragón llameante”).

Nada, cafelillo para quitar el frío, y a “rular” (hay mucho argot chicos).

Admito que me lo pasé como un niño circulando varias motos iguales por carretera, cruzando pueblos y llamando la atención de todo quisqui. Finalmente llegamos al “bar motero”. (Un bar motero amigos y amigas, es un bar normal con un descampado enfrente lleno de motos, que no os engañen), y nada, a desayunar…



En el fondo se trata de eso, de jalar. Nos apretamos un desayuno que yo juraba que no me acababa ni guardándome la mitad para la cena. Pero no, los tíos duros podemos con todo, a pesar de que después me costaba trabajo hasta pestañear.

Sobremesa cargada de palabras como; cilindros, válvulas, “arreones”, “monturas”, “ruladas”, escapes y una larga retahíla de palabras a las que yo asentía comprensivamente, a pesar de desconectar en cuanto me hablan de motores.

Al rato, mis rudos compañeros empezaron a mirar sus relojes, y empecé a escuchar una serie de frases que parecían no encajar en el ambiente

-Uy las 11, es que tengo que llevar a las niñas al basket…-

-Si, yo tengo comida en casa, y no he preparado nada-

-¿Las 11? Hoy cambiamos las cortinas en casa-

Y no pude contenerme, me puse en pié y ¡grité!

¡¿Qué?! ¿Niñas? ¿Comidas? ¿Cortinas? ¿Basket?

¡Los moteros no tenemos niñas, ni cambiamos cortinas, ni jugamos a basket!

¡Nuestra familia es la banda! ¡Y nuestro deporte atemorizar pueblos sin sheriff!

¡Yo seré vuestro líder, y haré de vosotros “los Ángels de l’infern” de la plana de Lleida!

Es mentira… no lo hice. Es mas, un rato después al llegar a casa, y aún oliendo a carretera, me descubrí lavando entre los platos mi “sartén de tortillas de patatas”, y me di cuenta de que aún me falta mucho para ser un tipo duro.

Pero estoy en la senda correcta, lo sé… Es mas, este mes, después de ser segurata de un concierto jeviata, y mi iniciación motera, es oficialmente, el mes del “tío duro”

13 diciembre 2006

meme

Si, finalmente ha pasado, me han colgado un meme.
No se si me gustan o no, no soy popular como folken, donot, jbauer y otros. Así que no suelen pasarme nada (snif)
Ehem… mejor paso al meme por que si no, esto parecerá un post deprimente, y no, lo que pretende es ser un reflejo cuarteado de mi personalidad (¿alguien puede decirme que coño quiere decir meme?)

La 5ª frase de la página 123 del libro más cercano (no mi favorito) dice lo siguiente:

“Comprendió que, en la lejana tierra de su cautiverio e infamia, había pensado en su lugar natal como cuando lo dejó; no como cuando estaría cuando volviera.”

Autor: Charles Dickens
Título: Los papeles póstumos del Club Pickwick


Se lo paso a:

Esteve, por que hace tiempo que lo leo y aún no me imagino que lee.
DIY, por que me huelo que será algo interesante.
Miriam (flxt), por que seguro que lee algo más que la “Tp” y “TV y novelas”

PD se lo pasaría al blocaire invisible, pero no creo que cayese en una trampa tan burda…

11 diciembre 2006

Ojalá

Hoy he gritado en silencio por tu culpa.
Hace tiempo descubrí que existías, y desde entonces he conocido una sensación de injusticia más.
Hoy he intentado imaginar que podía sentir toda la gente que sufrió tu gobierno de “difuntos y flores”. Y no he sabido responderme, por que nadie puede alegrarse por algo tuyo, ni siquiera por tu muerte.
Hoy no he podido dejar de pensar en el dolor de mucha gente, y he tenido que dejar que Silvio Rodríguez diga por mi lo que no se expresar.

Ojalá

Silvio Rodríguez

Ojalá que las hojas no te toque el cuerpo cuando caigan
para que no las puedas convertir en cristal.
Ojalá que la lluvia deje de ser milagro que baja por tu cuerpo.
Ojalá que la luna pueda salir sin ti.
Ojalá que la tierra no te bese los pasos.

Ojalá se te acabé la mirada constante,
la palabra precisa, la sonrisa perfecta.
Ojalá pase algo que te borre de pronto:
una luz cegadora, un disparo de nieve.
Ojalá por lo menos que me lleve la muerte,
para no verte tanto, para no verte siempre
en todos los segundos, en todas las visiones:
ojalá que no pueda tocarte ni en canciones

Ojalá que la aurora no dé gritos que caigan en mi espalda.
Ojalá que tu nombre se le olvide a esa voz.
Ojalá las paredes no retengan tu ruido de camino cansado.
Ojalá que el deseo se vaya tras de ti,
a tu viejo gobierno de difuntos y flores.




Te vas sin pagar, pero me dejas el consuelo de saber, que tuviste que hacer el ridículo y pasar por viejo chocho para salvar el pellejo de la cárcel (por que así te lo permitieron varios). Me quedo con que al menos no se te permitió acabar como el héroe que pretendías ser.

Espero que aprendieses algo de la entereza de la gente que no se doblegó y de la que ni siquiera tuvo oportunidad de no hacerlo.

Hoy me dormiré con el rasgar de las cuerdas de las canciones que Víctor Jara no llegó a tocar, y entre ellas alguna dirá:

Ojalá no hubieras existido.

Ojalá no vuelvas a existir.

Ojalá te olvidemos…

10 diciembre 2006

Just a cup of coffee

La casualidad las hizo coincidir, pero fue algo más lo que las llevó a hablar de él.

Ahí estaban, en una de las cafeterías mas chic de la ciudad, tomando “algo” sin tomarlo, una simple excusa para estar. Un café que en realidad era a la vez un escudo y un mazo para romper el hielo.

Siempre habían sabido de la existencia una de la otra, pero nunca se habían encontrado. Conocían perfectamente el perfume y el color del carmín preferido de la otra. Marta sabía distinguir el número de teléfono de Sonia en una larga lista, y Sonia había llegado incluso a intuir en que días tenía el periodo Marta. Todo eso, y seguramente cosa mas macabras, sin haberse visto jamás en persona.

El encuentro fue inesperado, abrupto, casi hostil. La incomodidad las había llevado sin saber como, a sentarse una delante de la otra, cada una protegida por su humeante taza de café.

La charla pretendió ser cortés, casi ortopédica. Los movimientos de una y otra eran pausados y calculados como los de un faquir. Pero las complicaciones, el dolor y la soledad que una misma persona les había hecho sentir las unían quisieran o no.

Marta estaba dolida, hacía dos meses que él remoloneaba con sus obligaciones de padre y ex marido. Sonia llevaba unos meses asustada, algo en el ambiente le decía había otra como en su tiempo lo fue ella, y miraba a Marta imaginándose en su lugar.

El camarero las sacó de su silencio preguntando si se les ofrecía algo más, y Marta contestó secamente.

- Un Glen Grant sin hielo por favor.-

- Lo mismo, gracias- Dijo Sonia sin saber de que se trataba.

Marta acarició su vaso, y se perdió en los tonos dorados de la copa. Miraba a Sonia, y no podía evitar recordar como era todo hace unos años. Sonia la miraba con una mezcla de temor y respeto. Sabía lo mal que lo había pasado, o mas bien lo suponía, y temía descubrirse un día en su lugar.

A esa ronda le siguió otra. Apenas hablaban, pero una sensación magnética las hacía seguir ahí sentadas una enfrente de la otra.

-¿Sabes?- dijo Marta rompiendo el tenso silencio. -Me gustaría saber que pensaría la prensa si supieran lo mal que huelen sus pedos- y soltó una carcajada nerviosa. No había hablado ella, lo había hecho el whisky

Pero dejó de reírse al ver que Sonia la miraba seria.

-¿Pedos? Jamás se ha tirado uno estando conmigo- Dijo respondiendo accionada por un resorte, y acto seguido calló, casi preguntándose si hablaban de la misma persona.

Ambas se violentaron. Un comentario absurdo y burlesco, intentando humanizar al hombre que sin quererlo las había llevado a esa situación tan desagradable, se había convertido en una sensación mutua, que parodiaba el escatológico acto al que hacía referencia.

Marta se levantó y se fue dejando la cuenta por pagar, -es igual- pensó – de todos modos paga él-.

Entre lagrimas nerviosas pensó que el muy hijo puta se comportaba con aquella furcia treinta añera, mientras que con ella siempre había sido un simio.

Mientras que Sonia, sentada en silencio delante de su copa de whisky, pensaba que él no sentía con ella la confianza suficiente como para mostrarse tal como era.


Que curioso es el valor que podemos dar a las cosas…

02 diciembre 2006

Iron Maiden

La noche arrancó emocionante, llegábamos una hora tarde a currar. La culpa era a partes iguales del tráfico de Barcelona, y de la poca emoción que nos daba el asunto.

Lo admito, no soy fan de los Maiden. Pero también admito que puestos a ir a trabajar a un concierto de un grupo del que no soy fan, me hacia gracia la idea de ver a uno de esos grupos clásicos.

Así que aparecimos por la puerta 5 del St. Jordi una hora tarde, y sin cara de arrepentimiento, que para algo somos unos irresponsables profesionales.

Nos miraron mal, con esa cara que ponen las madres cuando los niños se portan mal y hay visitas en casa; “Te pegaba una leche… pero sería peor el remedio que la enfermedad”.

Nos dieron nuestras camisetas negras de “servicios especiales”, y nos castigaron poniéndonos en los lugares más insulsos que les quedaban.

-A ver, uno. Tu. Te quedas en esta puerta, y vigilas que no pase nadie que vaya sin gafete.-

¿Es a mí? Y acto seguido pensé que aquel hombre mayor, y con unos bíceps del tamaño de mi cabeza, debía redefinir en su mente el concepto de “puerta”. Ya que señalaba un pasillo con una valla de esas de las obras cruzada en medio.

Estaba justo en el lateral del escenario, a unos 5 metros del escenario, -bueno, estaré tranquilo y los veré de cerca-, pensé.

A los 5 minutos estaba harto. Por ahí no pasaba nadie, menudo coñazo. Al rato empezó a pasar gente, y yo con cara de tipo maloso los miraba como diciendo, “por que llevas gafete, que si no…” y los dejaba pasar. Evidentemente en el backstage todo cristo lleva como mínimo un gafete que viene a decir “soy guay” o “estoy ocupado”. Pero de repente, vi a dos tíos sin gafete que se dirigían decididamente hacia “mi” puerta. Les di el alto, y con mi preparada voz de tipo duro les dije:

-Perdona, sin gafete no se puede pasar- (os juro que solo me faltaban las Ray ban)

Uno de ellos saca del bolsillo una cartera y me dice –Policia- y me enseña la placa a la vez que yo me derrumbo. ¿Por qué me tienen que pasar estas cosas a mi? Soy una persona tranquila, y para una vez que vacilo un poco, pam, tiene que ser policia.

Evidentemente los dejo pasar, y me juro que a partir de ese momento va a pasar quien quiera por esa puerta.

No pasa mucho rato antes de que venga uno de los jefecillos y me mande a la otra punta del estadio. Se ve que la gente se dedica a tapar el cañón de luz principal.

-Ve y no les dejes taparlo, pero con calma, con educación- jefecillo dixit.

Por favor ¿no sabes con quien estas hablando? Tengo un master en psicología de borrachos.

Disfruto como un enano pasando por todos los controles de seguridad con un saludo cómplice, y miradas de; “hey colega, somos del mismo gremio”

Llego al cañón. Lo dirige un tal Gary, un inglés que esta hecho un armario, pero bajito. Vendría a ser una cómoda..?

Puedo entender su inglés tanto como el slang español de cualquier preso común de can Brians.

Por suerte aún es temprano, y la gente está tranquila. Me sorprende ver a bastantes niños, y parejitas sentadas comiendo el bocata. La cosa parece tranquila, advierto a la gente de las filas superiores sobre la luz, y me dedico a ver el ambiente, hasta que de repente una mano aparece en la luz, me giro, y veo a un zumbado abrazado al cañón, haciendo “cuernos” en la luz. Mi amigo Gary ni se inmuta, le pega un puñetazo en plena nariz y sigue a lo suyo. Yo agarro a mi nuevo amigo por la chupa, lo saco de detrás de la valla y lo tumbo en el suelo. En seguida dos seguratas se lo llevan a la enfermería. Gary me sonríe, yo flipo…

Tengo una vista inmejorable del concierto de los Maiden, Gary lleva el cañón del cantante (¿Dickinson?) y no nos tapa nadie. La verdad es que la cosa es bastante flojilla, hasta que a medio concierto tocan fear of the dark y la cosa se anima. Todo el público levanta las manos, y una marea de cuernos saluda a Iron Maiden. Empiezan a encenderse los primeros mecheros, y contrastan con la luz de los centenares de pantallas azules de los móviles. Cuando la canción acaba, las 18000 personas corean “oles”. Veo que sacan a Eddie, y me doy cuenta de que el concierto de verdad empieza ahí. Así que decido largarme. Nadie sabe quien da las órdenes, por que hay mucho mando intermedio, así que abandono a Gary y voy al backstage. Me acerco a uno de los jefecillos y le digo que me han mandado al escenario. -OK, ponte ahí-, y me señala el frente del escenario, entre la primera fila y el grupo. Me coloco en mi sitio, y veo a mi hermano y a un par de amigos unos metros más al centro. La gente enloquece por segundos. Ahora si, estoy en el meollo.

La masa de gente, levanta los brazos una vez más, señalando con sus cuernos al techo del palau, y yo imagino aquello como una divertida manifestación de croissants. Al poco tiempo empieza la diversión de verdad, aplastamientos en los que hay que arrancar literalmente a la gente de entre las vallas, lipotimias, golpes de calor, dar de beber y remojar el cogote a los que lo pedían, y detener muy a mi pesar a los que intentaban subir al escenario.

En los pocos momentos de calma pienso en los fans de maiden que conozco y en que matarían por estar a medio metro de ellos, lo hago para paliar un poco el asquito que me da que cuando los del grupo se acercan al borde, me caiga su sudor encima.

Acaba el concierto, hacen un único bis, y no salen a saludar… mal… a los dos minutos el jefe nos dice que el grupo quiere a todo el mundo fuera. No saldrán a hablar ni con los VIP’s. Disfruto riéndome de sus pases especiales de todos colores, diciéndoles que los artistas no quieren ver a nadie; -No, ni a ti-. Que gusto…

Los fans de primera fila se vienen a despedir de nosotros, nos dan las gracias por el agua, y cuidarles la ropa, que majos…

Me voy contento. El final del concierto ha sido emocionante, y la experiencia ha valido la pena. Cuando me doy cuenta, estoy canturreando:


fear of the dark…

dum dum…

fear of the dark…

(solo me falta levantar el puño en alto y señalar al cielo con mis dedos meñique e indice para dibujar un... croissant)

28 noviembre 2006

Pequeñas cosas


La vida da muchas vueltas, todos lo sabemos, pero no siempre somos conscientes de ello.

De vez en cuando, de modo aleatorio y caprichoso, las circunstancias nos hacen pequeños guiños para dejarnos claro que aquí estamos de paso. Que en un momento pueden cambiar muchas cosas, y desvanecerse tantas otras.

Una fecha vacía en el calendario, puede recordarte algo que nunca llegó a pasar y ha cambiado la vida de todo tu entorno. O una pequeña anotación al borde de una página, puede hacerte ver que tu mundo no tiene nada que ver con el de hace unos años.

Por suerte, hay detalles que nos hacen ver que algunas cosas no tienen por que cambiar, y un caramelo puede llevarte tiempo atrás, a una comida que parecía una más, y no lo fue. O un simple bocadillo del Subway recordarte una noche de opera inolvidable y fría en Berlín.



Espero seguir encontrando pequeños detalles que me dejen pensar en las cosas que valen la pena. Ese es el poder de las cosas pequeñas.

27 noviembre 2006

fucking in the name of...

Hace un tiempo, alguien me dijo que esta canción tenia el ritmo perfecto para una sesion de sexo salvaje.



Personalmente coincido con la idea, a pesar de que aun no la he puesta a prueba...
¿Que canciones teneis vosotros en vuestro imaginario sexual?

17 noviembre 2006

La sobreprotección y Burguer King

Mi generación es la primera en la historia que se preguntó a que narices olían las nubes. Esto, a parte de ser una lacra que cargaremos durante décadas (es muy probable que nuestros nietos algún día nos exijan explicaciones), implica cierta responsabilidad para con las generaciones venideras. Nosotros sabemos el mal que puede llegar a hacer la publicidad en particular, y la tele en general.

Nosotros nos quedamos traumatizados por aquel pobre perro abandonado, a pesar de que “el nunca lo haría” (mi madre querría tener unas palabras con el señor purina, ya que desde ese día mi casa fue un orfanato de perros y gatos “encontrados”), acabamos con el álbum Danone de David el nomo a medias, nos tocó crecer entre adultos con hombreras, algo que jamás se permitiría a un niño hoy en día.

Es mas, ¿recordáis las series? Nos metieron unos chutes emocionales increíbles; los dramones de “Marco”, y “Jackie & Nuca” (maldito cazador…), la ñoñería de la abeja Maya, la ambigüedad del Heidi y su abuelo, para pasar después a ver aliens comer ratas vivas en V… ¿Dónde estaba el famoso comité del audiovisual entonces?


No se hasta que punto ha influido la tele en nosotros, pero creo que bastante equilibrados hemos salido después de mezclar a la bruja Avería y la abeja Maya en nuestras tiernas cabecitas.

Por eso quiero romper una lanza a favor de Burguer King ahora que quieren obligarles a retirar el anuncio de su XXL por no se que historias de la obesidad infantil. Si, mucha grasa, mucho colesterol y demás historias en sus hamburguesas, pero hay dos cosas que debemos tener en cuenta; sus patatas son las mejores de todos los fast foods (licencia del autor), y que el que paga la hamburguesa, es decir, uno mismo, o sus padres si es menor, es el responsable de la dieta. ¡El problema no es el anuncio!, es que muchas veces dejamos que factores externos piensen por nosotros, y de paso eduquen a los niños (la TV, la escuela, etc...).

Así que asumamos cada uno la responsabilidad que nos corresponde, dejemos en paz a la TV, que al fin y al cabo, es una distracción, no un mentor, y sobre todo, menos ñoñería con los niños, que al final las nuevas generaciones acabarán siendo una panda de lerdos con tanta sobreprotección.

Y que no se quejen, al menos a ellos nadie les dirá la gran mentira de: “estudia, o no serás nadie"
Si, y un huevo… Al menos si se lo dice alguien será la tele, y las mentiras, prefiero que me las diga el Ranger de Texas, que alguien cercano.

07 noviembre 2006

El grito

- ¡¡¡Paulaaaaaaa te he dicho que te acabes la leche..!!!-

-¿¡Pero quereis hacer el favor de levantaros!?-

-¡Como tenga que repetir que te laves los dientes, no tendrás que hacerlo nunca más!-

Estos son algunos de los gritos que llevo escuchando varias mañanas a partir de las 8:30.

Se ve que la tal Paula y su hermano (Martín creo que se llama), se levantan algo perezosos y con el estómago cerrado por las mañanas. Es algo común, yo mismo soy de desayunar poco, un café con leche a lo sumo, y sobre lo de la pereza, pues es un arte que se mejora con el tiempo. La diferencia entre Paula & Martín, y yo, es que su madre tiene a bien compartir su desesperación (a gritos) con el vecindario.

En parte admiro la energía de esa buena mujer por las mañanas, no cualquiera puede berrear a ese nivel de decibelios sin hacer un buen precalentamiento de cuerdas vocales, pero admito que mi sueño puede a mi admiración por ella.

El primer día que escuché dicha verbena, le di largas, remoloneé un poco y volvía dormirme. La segunda vez, me cubrí la cabeza con la almohada, y no se si el sueño o la falta de oxígeno hicieron que volviese a dormir. En la tercera ocasión, empecé a desesperarme. Acabo de trasladarme, y me vi a mi mismo sufriendo ese despertar hasta que Martín, que parece el menor (si, ya casi son de la familia) se fuese a la universidad…

Pero esta mañana ha sido diferente, con el enésimo grito de la madre (que como nadie le grita, desconozco su nombre) a Paula por la leche, mi mente ha convenido que era necesario actuar… No he podido reprimirlo, es mas puede que estuviese esperando el momento sin saberlo. En cuanto he escuchado el grito láctico, me he levantado de un salto, y he gritado con todos mis pulmones:


-¡Paula, haz el puto favor de tomarte la leche, y decirle a tu hermano que salga de la cama!-


Y se ha hecho el silencio…

Y no se si ha sido por el sueño, o por lo orgulloso que estaba, pero he vuelto a dormirme con una sonrisa.

29 octubre 2006

La cita

La luz se colaba por los enormes ventanales del hotel sin reparar en el barullo del gentío.

Julio lo observaba todo con indiferencia. Todo aquel movimiento representaba demasiada información para su atribulado cerebro. Se encontraba sentado en el hall del mejor hotel de la ciudad, sufriendo cada segundo, cobrando conciencia de lo poco que le quedaba para realizar su seño más insospechado. Él, un hombre de mediana edad, mundo recorrido, y profesional de éxito, se sentía como un chiquillo haciendo cola en el parque de atracciones.

Intentó relajarse. Su mirada se perdió coqueta por los detalles de la impresionante estancia en un deseo inconsciente de hacer volar el tiempo, y así, mientras él se encontraba distraído en la adivinanza que le proponía un enorme jarrón, sobre la naturalidad de sus flores, llegó ella.

Su entrada estaba cargada de la despreocupación que da el saber que lo esperan a uno.

Él la reconoció enseguida. No se habían visto nunca en persona, pero la mirada de aquellas fotos estaba grabada a fuego en su mente. Se incorporó, y a medida que se acercaba, la estampa de aquella mujer parecía agrandarse. Un cuerpo esbelto y cuidado, enfundado en un traje chaqueta negro y coronado con una melena azabache y una mirada firme.

Se saludaron con una amable frialdad. Apenas habían cruzado un par de correos electrónicos, y una fugaz llamada para acordar los detalles de su cita.

-¿Está todo listo?-

Preguntó ella mientras dirigía su mirada hacia el bar del hotel

-Si, tenemos reservada la suite-

Julio procuraba mantenerse inmutable, pero era un manojo de nervios, no podía creer lo que estaba haciendo.

-Pues subamos, no me gusta perder el tiempo­-


Avanzaba dos pasos por detrás de ella, mientras repasaba mentalmente una y otra vez, todos los detalles que habían pactado. Parecía una mujer sumamente exigente, y por nada del mundo quería que algo saliera mal, y ella desapareciese para siempre.

Al llegar a la habitación, Julio abrió la Puerta dejándola pasar, y ella le agradeció el gesto con una sonrisa. A pesar de estar acostumbrada a que los hombres fuesen galantes con ella, éste, mostraba una ternura en sus gestos que le hacían olvidar la atracción física que solía motivar dicho comportamiento. Para Julio aquella sonrisa, fue como si pudiera respirar por primera vez desde que la había saludado.

Entró tras ella, y esperó alguna reacción que le indicase si todo era de su agrado. La observaba a contraluz, mientras ella se deleitaba viendo como se habían cumplido todas sus peticiones; las flores, presentes en cada rincón. Las botellas de agua mineral de su marca favorita, suave jazz en el hilo musical, y unos carísimos bombones de marrón glaseé ofreciéndose en la mesa.

El silencio se apoderó de la suite. Sin mediar palabra, y en un gesto estudiado y casi mecánico, ella dejó resbalar su chaqueta con aparente despreocupación, dejando sus hombros al descubierto. Julio estaba paralizado, era el movimiento más sensual que había presenciado jamás…

Giró su rostro, y dejó pasear su mirada por todo el cuerpo de Julio.

- ¿Empezamos?-

Si Julio no hubiera sido consciente de que se encontraba ante una gran actriz, y de que había un cámara montando sus bártulos a su lado. Habría estado encantado de tomar esas palabras como la más agradable de las propuestas. Así que se limitó a sonreír para sus adentros y resignarse a entrevistar a la actriz de sus sueños.

23 octubre 2006

Descubrimientos

La historia es, resumiéndola de una manera un tanto vaga, una larga hilera de descubrimientos concatenados. Y quien habla de la historia, habla de la vida.
Todo empieza cuando eres un inepto feliz. Sabes de poco, pero cuentas con especialistas que se encargan de solucionarte los problemas, los pocos que puedas tener. Creces un poco, y descubres que en cierto grado, los berridos que emites, sacan de quicio a tus padres, adultos, tutores, etc… con lo que mediante extorsión puedes cubrir un amplio abanico de necesidades (depende de tu insistencia y la paciencia de los otros).

La cosa se complica cuando descubres al sexo opuesto… coño, hay una serie de niños que juegan fatal a fútbol, y que juegan a cosas en las que hay una falta alarmante de posibilidades de hacer el bruto. Las niñas (en mi caso). Creo que esa es la primera complicación que soy capaz de recordar en mi vida. ¡Que raras se me hacían! (y aún hoy a ratos, se me hacen)

Poco a poco descubres que, a pesar de que se te hacen algo pesadas, no te gusta que no te hagan caso, pero no le das importancia… El “primer problema gordo”, sobreviene el día en que te das cuenta de que esos seres que llevas detestando la mayor parte de tu corta existencia, te gustan… Demonios, rayos y truenos. Por suerte las hormonas hacen que olvides gran parte de tus reticencias.

A medida que descubres cosas, el mundo se vuelve un lugar mas extraño y complicado.

Descubres que tu madre tiene olfato de mastín para detectar el tabaco.

Descubres, que aún que a ti te lo parezca, no “vas bien”… y si, se te nota en los ojos.

Que fumar marea y sabe mal, pero queda bien.

Que hay que “saber besar” (¿Por qué demonios no viene eso ya de serie en el código genético ?)

Mas tarde te das cuenta de que el dinero mueve el mundo, y que no es justo.

Incluso hay un punto de la vida en que descubres que nada te gusta.

Un día descubres tristemente, que los amigos no son para siempre, y es mas jodido aún, cuando te lo demuestra el amor por primera vez.

Que con idealismo no puedes pagar las salidas nocturnas ni las entradas de cine. Si, el maldito dinero sigue abriéndote los ojos.

Con horror descubres que tu cuerpo no sabe regularse, el día en que decide hacer que te salgan granos.

Aún recuerdo el día en que descubrí que hay pelos que “no salen”, y duelen… En serio, me pareció algo tan absurdo que no me lo creía.

Pero también hay descubrimientos agradables, como cuando lees por primera vez a Bécquer y crees ser el primero en comprender sus versos, o cuando sales a la calle por primera vez después de hacer el amor, y flotas…



Hay descubrimientos que te empujan mas a hacerte mayor que otros, como cuando te das cuenta de que tu idea de ser arqueólogo tiene pocos visos de hacerse realidad (si quieres sobrevivir y seguir yendo al cine). Cuando te das cuenta de que no eres inmortal (lo sabemos, pero un día nos damos cuenta). Y ese día nefasto, en que te das cuenta de entiendes por que te decían “eso” tus padres…

Cuanto mas sabemos, más se complica todo. Pero algo nos empuja a saber más, a seguir creciendo…

¿Qué relación hay, en realidad, entre la felicidad y la complejidad?

16 octubre 2006

El laberinto del fauno

Lo primero que quiero destacar de esta película, es a Guillermo del Toro. Una vez tienes una historia de este tipo, da igual si pones como actor protagonista a Sean Penn, a Sergi López, o al Fari. Una buena historia la puede contar cualquiera.

Aun que no lo parezca, hay que dejar claro que es una película española.
Hay varias razones que os podrían llevar a pensar que la película es de cualquier otra nacionalidad:

- Es una peli española, y no salen tetas.

- Aparece Ariadna Gil, y no finge ningún orgasmo.

- Aparece Maribel Verdú, y no hace de sex simbol.

- No hay escenas con carga sexual.

- Los efectos especiales son coherentes, y no parecen hechos por mi sobrinito.


Una historia original, bien tratada. Con los efectos especiales justos, y con un reparto agradecido. Lo único que no entiendo, es que le ven a Ariadna Gil… (¡Sobreactúa siempre!)

Así que por mi parte, la recomiendo muy mucho. Da gusto ver una película basada en la historia y no en explosiones, persecuciones o tetas…

10 octubre 2006

Cabreo

Yo estaba en la cocina tranquilamente, decidiendo que comer.

De repente sonaron las llaves en la puerta de casa.

-Que raro- Pensé -David no tenía que venir hasta las 6- (eran las 13:45).

-Hola, vengo a buscar una cosa y nos vamos-

El nos vamos era por que venía con alguien. La verdad es que estaba bastante absorto decidiendo que llevarme a la boca, así que solté un “buenaaaas” y ni siquiera miré quién era. Lo más seguro es q estuviera haciendo campana con algún compañero de clase.

A los 30 segundos volvieron a pasar por delante de la puerta de la cocina.

-Nos vamos-

Esta vez me giré, y alcancé a ver a su amigo. El también se giró, se paró en la puerta y me dio la mano (no recuerdo que nombre me dijo).

-¿Tu también eres de Igualada?- Me preguntó.

-No, yo soy de Barcelona-

-Ostia, como yo. Soy de la mina- ¿ehhhh? ¿De la mina?

Me fijé. Sinceramente, me llamó la atención, que mi callado, calladísimo compañero de piso, de la deep catalonia se juntara con un gitano de la mina…

Algo raro pasó por mi cabeza. Soy desconfiado desde que tengo memoria, y algo me olió fatal. David estaba normal, inexpresivo como siempre, algo raro cuando traes a un amigo a casa. Salieron rápido de casa. Y mientras cavilaba salí al balcón. Los seguí con la mirada, cruzaron la calle en dirección a La Caixa. Mierda, si no supiera que David tiene que ingresar el dinero del piso hoy, estaría seguro de que le están robando. Tengo el teléfono en la mano, pero no me decido.
Cuando salen, veo como David le entrega algo en mano, y el gitano sale corriendo. ¡Mierda, mierda, mierda!

El pobre chico esta blanco. Hecho polvo aun que no quiera reconocerlo. Solo alcanza a decirme que no me ha dicho nada para no meternos a los dos en un lío.

-Lo malo, es que ahora, cuando necesite pasta vendrá a buscarme-

No sabes la cagada que has hecho, pienso.

-Tienes que ir a poner una denuncia tio-

-No, no quiero problemas. No le harán nada y vendrá a buscarme, sabe donde vivo-

“Donde vivimos”, pienso. Y crece en mí, la sensación de que se nos viene mierda encima.

Lo dejo pensar un poco, que se relaje o se desahogue, como quiera.

Coge la mochila y se va a clase, no quiere quedarse pensando.

A los 20 minutos de irse David suena el interfono. Lo descuelgo, y es nuestro amigo "de la mina", que dice necesitar “hablar con Xavi”…

-Aquí no hay ningún Xavi- Digo.

-Vengo a devolverle la pasta, ábreme-

-Deja la pasta en el buzón, es evidente que sabes que piso es. No pienso abrirte-

El tío deja de picar, y por el balcón veo como se va.

A los 5 minutos, el corazón se me acelera. Alguien está aporreando nuestra puerta. La mirilla me confirma que nuestro amigo ha vuelto.

-¡Ábreme, quiero hablar con Xavi!-

El corazón me va a mil, y noto como automáticamente el cuerpo se prepara soltando adrenalina.

-Lárgate, no te voy a abrir-

Los porrazos se intensifican, y los gritos de nuestro “amigo” denotan que va puesto.

-Estoy llamando a los mossos, puedes esperarlos aquí, o largarte.

(y evidentemente estoy llamando a los mossos)

Doy su descripción, mientras veo desde el balcón como se va. Está algo desorientado, va puesto… y lo veo desde una buena distancia.

A los 20 minutos me llaman los mossos, lo han pillado. (¿..? ¡wow!)

En nada aparecen 6 mossos de paisano en mi puerta. Les cuento lo que aquí os escribo, y enseguida preguntan por mi compañero de piso. Lo van a ir buscar a la uni. Pobrecillo pienso, se va a llevar un susto…

Al final, reconocimiento, declaración, y un intento de tranquilizarnos

-En 9 años de servicio, no he visto una sola represalia por una denuncia- …bueno…

Según nos han dicho, tiene muchos muchos números de ir a prisión (de 3 a 6 años). Se ve que es un pieza, y tiene antecedentes…

Hasta aquí la aventura (espero).

Pero estoy cabreado. Primero por que han invadido mi intimidad y mi seguridad. Y segundo, por que… estoy harto del tema “gitano”.

Se que en los tiempos “politicamentecorrectos” que vivimos, esto suena fatal. Pero en mis 26 años, todas las relaciones con gitanos que he tenido han sido involuntarias y desagradables. Y paso de racismos, xenofobias y demás mierdas. Hablo de estadísticas. Hablo de impunidad, o

¿hay más minorías en este país al margen de la ley?

¿Quién más puede extorsionar en las obras, o conducir sin carné ni seguro?

¿A quién mas se le permite aplicar sus propias leyes al margen de las de todos para evitar problemas?

Si a mi me pillan sin seguro o sin carné, me crujen… Yo he visto como a ellos los ven infringiendo el código de circulación en plan gore, y el coche de los mossos acelera y se larga…

En el caso que os cuento, he alucinado con la eficiencia de los mossos, y les agradezco el trato genial que nos han dado. Pero eso no quita otras cosas que he visto y vivido.

¿Y sabéis que? Lo peor, es que con quién más hay que cabrearse es con el estado, con el sistema…

con la normalidad que le damos a esto…

No se, estoy cabreado…

05 octubre 2006

Atascado


Un desatascador suele ser una jroña (o ventosa) de plástico cóncava (o convexa según el lado que se mire), encastada en un palo, que bien puede ser de madera o de materiales diversos que no vienen al caso. Suele utilizarse para desatascar conductos, o para atascarlos en las cabezas de la gente en los dibujos de Bugg’s Bunny.

Un desatascador puede ser más que eso. Puede ser una necesidad urgente, si se te atasca el fregadero en plan deep throat, y todos los productos se muestran inoperantes para desatascarlo.

Pero un desatascador, puede ser aún más. Puede convertirse en el reflejo de un drama, cuando tu fregadero es tozudo, y no encuentras un puñetero desatascador en todo el barrio.

Lo he buscado en grandes superficies comerciales, en ferreterías de varios calados, droguerías, y hasta he ofrecido mi alma al dueño de un bazar chino para conseguir uno. Nada, sigo sin desatascador y por ende sin fregadero funcional. Lo cual me lleva a lavar los platos en el baño, siendo esto aparte de incómodo, patético…

Parece mentira cuan variable es el valor de las cosas. Siento curiosidad (y cierto miedo) por saber cuanto llegare a estar dispuesto a pagar por un simple desatascador.
(Descarto al fontanero, por que esto ya es algo personal)

Sea como sea, mi problema de momento, es que estoy atascado...

02 octubre 2006

¡A votaaaar!

Estos días se celebran los “san no se cuantos años” de sufragio de la mujer in Spain.

La inclusión de la mujer en democracia no fue una “buena idea”, sino la corrección de una injusticia.

A mí, cuando me recuerdan este dato, me da por pensar en los índices de participación actuales. Hoy en día, cuando el derecho a votar ya se ha equiparado, resulta que en Catalunya, votan 6 de cada 10 catalanes con derecho a voto en las últimas elecciones, y en las generales, fueron a las urnas 7 de cada 10 españoles (en las últimas, a pesar del jaleo del 11M la participación fue del 77%).

No se a los demás, pero a mi, me parecen cifras muy bajas. Que a 4 de cada 10 catalanes se la sude quien gobierne, da que pensar. En realidad, y salvando las distancias, me llama más la atención que quien puede no vote, y no que no lo haga quien no puede.

¿Qué pensarían las personas que lucharon en su día por estos derechos civiles?

Es mas, ¿Qué podemos hacer nosotros para cambiar esto?

Mi aportación es una idea, sencilla pero con garra (hay que leer esto en plan José Luís Moreno)

Propongo que de cara a las elecciones al parlament de Catalunya, se sorteen paneras, un par de coches, y un apartamento al pie de Montserrat. Para mejorar aún más, podríamos poner como presidentes de mesa electoral a los actores de diversas series; Lost, House, Vent del plà, Sexo en NY, el cor de la ciutat, aquí no hay quien viva…

(la elección de las series se haría por un comité de sabios de esos tan sabios, para motivar a cada sector de la sociedad y fuerzas vivas catalanas)

Y nada, si la cosa funciona, pues lo aplicamos a las elecciones generales y problema resuelto.




No se, lo releo y visto el panorama político actual… no suena descabellado. Es más, creo que algunos ya están buscando fórmulas alternativas más descaradas para mejorar su la participación…


21 septiembre 2006

Odios

Estoy maniatico...
Si, hoy ya no he podido evitarlo, y he tenido que aceptarlo.
Así que me levanto, digo mi nombre en voz alta, respiro profundo y lo digo. Soy un maniatico.

Bueno, no se si soy o estoy (y no, no pretendo ponerme filosofico). Es simplemente, que en las últimas semanas, el número de cosas que me sacan de quicio se han multiplicado. De cualquier rincón, salta un detallito burlón y hace que odie ese segundo.
Son como duendecillos burlones, que hacen que durante unos instantes, odie...



Odio a los malditos carritos del super que van torcidos, su cabezoneria llega a tales puntos, que al final me quedo can las ganas de darles una patada, arrancar mis 50c de sus fauces, y dejarlos abandonados en medio del pasillo de los cereales.
Pero no, en algun rincon de mi psique, hay un budista. Me contengo. Me cuesta, pero me contengo. Sigo mi camino, hago mi cola, pago, y cuando me devuelven el cambio... Aparece otro duendecillo de la mala leche. Primero me entregan los billetes (o el billete, que soy un triste estudiente) y encima, la amable cajera pone la monedas...
¿¡Pero que no ve que poniendo asi el cambio es mas dificil de guardar en la cartera?!
A estas alturas, la cajera ya tiene cara de duende. Estoy seguro de que lo saben, y por dentro rien con malicia, mientras yo hago malabarismos con la cartera, las monedas, billetes y ticket. (siempre compruebo el ticket...)

Y eso es solo la visita al super.

Odio los sofás con forros de plástico
que me limpien la cara con saliva (rollo abuela)
las prisas por la mañana (sorry Mowgli)
los perros con jersey
pitar en los detectores de metales
a los listillos pesados
destaparme los pies
que los bolis no pinten
que se me queme la cebolla (grrrrrrrrrrr)
que lean el periodico por encima de mi hombro
la gente que pasa de la higiene corporal, pero no de venir a clase

y por encima de muchas muchas cosas, odio tragarme un mosquito...
(¡y ultimamente parezco un camaleón!)

12 septiembre 2006

By the flies


El conocimiento no siempre sigue el camino de la enseñanza clasica.
Algunas veces, el empirismo puede superar la mejor de las lecciones, o incluso la formación de mas alto nivel.

El empirismo amigos mios, es una concatenación de circunstancias. Es una serie de guiños del mismissssimo caos. Y solo requiere de una cosa por nuestra parte. Atención.

-Dia de lluvia
-Humedad elevada
-El comportamiento de las moscas se torna "cojoneril" (permitidme la licencia, hasta la ciencia rehusa las cadenas)



Es curioso (y desesperante) como llega a comprender uno la evolución del rabo en los rumiantes..!

Alatriste


Tengo mal cuerpo desde que salí del cine, y es que estoy un poco harto de que se carguen buenas historias.

Uno ve la pasta que se han dejado en esta peli, el elenco de actores españoles, la publicidad que ha tenido, y la guinda del amigo Viggo Mortensen, y sinceramente, entra al cine esperando algo.

La primera impresión que tuve al empezar la película, fué que el tal Alatriste hablaba raro.

-Será para darle carga dramática a la situación-, pensé.

Pero en cuanto llevaba cinco minutos de peli, tenía clarísimo, que en cualquier momento Viggo Mortensen se tragaría la lengua en su intento de hablar en español. ¿Qué demonios le pasaba en la boca a ese hombre?

La película prosiguió dejándome la impresión de que se trataba de pequeños pedazos de historias cosidos uno detrás de otro.

Así que me pasé las dos horas largas de metraje, preguntándome cuanto habría cobrado cada actor, y si yo podría hacer lo que estaban haciendo. De Capitán Alatriste no, por que no tengo cara de malo, y me entraría la risa. Hum… eso descarta a la mayoría de personajes, ¡mierda!

¿Puede que colara como príncipe de Gales? No, tampoco cuelo como inglés. Para hacer de Fray Emilio Bocanegra no doy la talla, y paso de raparme la cabeza. ¿Y de Maria de Castro? Fijo que finjo mejor un orgasmo femenino que Ariadna Gil, pero no creo que me aceptaran en el casting.

¿Y de Iñigo de Balboa? (el personaje de Unax Ugalde) ¡Eh, de este cuelo! pero no, yo a la tal Angélica de Alquezar, la mando a freír espárragos… ;)

Llegué a la conclusión de que los papeles en los que colaría serían los de Javier Cámara (tal vez por que él lo hace creíble), o el de Pilar López de Ayala, que roza el ridículo, y es insultantemente sencillo.

En esto se acabó la peli, y me levanté pensando donde estaban mis euros, la novela y la salida (no necesariamente en este orden).

De todo, me quedo con el vestuario, las escenas que imitaban cuadros de Velazquez y Goya, el papel de Javier Cámara, y la absurda aparición de Pilar López de Ayala.

Espero encontrar una película que no me haga pensar, que lo mejor del cine, son las “chuches”.


NOTA: Gracias a mi maravillosa conexion a internet, y mis magnificas dotes con la informatica, me hice la picha un lio editando este post. En el transcurso algunos de vosotros queridos visitantes colgasteis comentarios, que se eliminaron al reeditar correctamente el post. Lo siento mucho... Nunca he borrado nada a conciencia. Que sepais que os he leido en las notificaciones que llegan a posteriori al correo, así que gracias; Folk, DIY, Grigri, Roque, MLorena)


27 agosto 2006

Rafting Calella 2006

Me asombra la irresponsabilidad de algunos políticos.

Todos hemos visto las imágenes del “concurso involuntario de rafting-car” celebrado hace pocos días en la riera de Calella.
En realidad cada verano vemos imágenes pareci
das en pueblos de la costa del Maresme.
¿La causa? Las rieras mal habilitadas.

El alcalde de Calella, ha acusado al CECAT (centre de emergències de Catalunya) de informar tarde del riesgo de lluvias.
Para los que no lo sepáis, yo trabajo en el CECAT. Así que os haré una pequeña foto de cómo funciona esto.

Cuando hay un aviso de lluvias (dado por el departamento de meteo de Generalitat), desde CECAT se avisa a bomberos, protección civil, policía local y ayuntamientos afectados.

Analicemos lo ocurrido fiándonos del alcalde, de su reloj y de su buena voluntad, ¿OK?

Según el alcalde, recibió el aviso 15 minutos antes de que llegara la riada.

Para hacernos una idea, cayeron cerca de 40 litros por m2, en 15 minutos. Éste tipo de fenómenos son de difícil predicción para los meteorólogos, ya que son hechos muy puntuales.

El CECAT, dio avisos de lluvias 24 horas antes. En el momento de la tormenta, los bomberos estaban coordinando mas de 40 salidas por inundación, así que se tardaron 12 minutos en dar aviso al ayuntamiento (siempre según el alcalde).
Yo me pregunto, ¿en 12 minutos el alcalde podía sacar 37 coches de la riera?



Supongo que los políticos ya no me decepcionan, por que mi confianza en ellos es mínima.
¿Cómo puede, el responsable de permitir que los coches aparquen en un lugar contraindicado, espantarse las moscas de esa manera?
Los alcaldes de muchos pueblos turísticos, sacrifican la seguridad, a costa de solucionar, por la vía cutre, sus problemas de aparcamiento.

Si te equivocas reconócelo. Si no quieres reconocerlo, al menos cállate. Pero si finalmente decides no callarte, que no sea para acusar a gente que si sabe como debe hacer su trabajo.

Y a todos, estáis bajo aviso. Si vais a Calella, cuidado con dejar el coche en doble fila, tienen el servicio de grúas más rápido de Europa (como poco).

Y las rieras, rieras son...