Porque el mundo es bonito, hasta vomitar.

28 septiembre 2010

¿Huelga?

Según la segunda acepción de la RAE, una huelga es la Interrupción colectiva de la actividad laboral por parte de los trabajadores con el fin de reivindicar ciertas condiciones o manifestar una protesta. 
Según la Declaración Universal de Derechos Humanos, en su artículo 23. Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones  equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo. 

Esta semana la C.N.T. ha tenido a bien, enviar a un chico a la entrada de la oficina para entregarme un panfleto y llamarme “compañero”. 
El panfleto en cuestión, invita a seguir la huelga general del 29 de septiembre, que (siempre según el panfleto), se convoca para el repartimiento justo del trabajo y la riqueza, contra los recortes sociales y la reforma laboral. Acaba diciendo que “sus crisis que las paguen ellos”. 

Más allá de la redacción infantil y marxista del panfleto que parece haber sido redactado por un hippy de primer año de universidad (procedente de la LOGSE). 
He leído el panfleto tres veces (las dos últimas solo para reírme), y la verdad, no tengo nada claro ¿Por qué ir a la huelga? Digo yo, que si me van a restar un día de sueldo, lo mínimo es saber por que… 

Lo de “sus crisis que las paguen ellos”, no me vale. Aquí todo el mundo culpa a los bancos, en parte por que son los sospechosos habituales, pero nadie pide responsabilidades a los gobiernos (que parece que se hayan enterado de golpe de cómo estaba montado el sistema). La raíz de todo este despiporre, es en parte el haber tenido el dinero tan barato tanto tiempo (aunque aceptaré correcciones de Folken).

 Hay cosas que no pasan de moda 

La otra gran razón, es que nos quitan derechos a los trabajadores. Pero… ¿nos conviene tener esos derechos ahora mismo? Quiero decir, facilitar el despido es una putada si te despiden, por que cobras menos. Pero facilita las nuevas contrataciones, que al fin y al cabo es lo que quieres conseguir cuando estas en paro, OTRO CURRO. 
No se, rechazar una reforma laboral pensando en que me van a despedir no me parece lógico. Entonces mejor preocuparnos por como queda el subsidio del paro. 

No me he leído entera esta reforma laboral, y tampoco me he leído la anterior, así que no opinaré sobre si esta es mejor o peor (la ignorancia es muy osada). No me creo a los sindicatos, y tampoco al gobierno. Pero el pollo de la huelga, empezó con la bajada de sueldos de los funcionarios (¿un 5%?). Bien, a mi me han bajado el sueldo un 10% y lo entiendo, o lo hacemos así o despiden a compañeros.   

Así que no hare huelga. Primero por que los sindicatos no la organizaron en su momento (y no me siento representado por ellos), segundo, por que creo que hacen falta reformas (a nadie le gustan las vacunas), y tercero por que no quiero perder un día de sueldo por algo que no me convence. 

Espero, que igual que yo respeto a los que hacen huelga, se respete mi derecho a trabajar, opinar y elegir…

22 septiembre 2010

Correparlamentaris

Bos Taurus, especie de mamífero artiodáctilo de la familia Bovidae. Un toro vamos.  
Un mamífero de sangre caliente como nosotros. Los machos se distinguen por su cornamenta desarrollada, y suelen tener un peso cercano al que alcanzan algunos europarlamentarios, presidentes de congreso, y expresidentes de club de fútbol. 
Los hay de varios pelajes, albardado, bragado, estornino, azabache… Pero quiero insistir, en el tema de que no dejan de ser un mamífero de sangre caliente. 

Hace unos meses, el parlamento catalán, en una decisión histórica (y algo histriónica en las formas), decidió, mediante votación, prohibir las corridas de toros. En principio la decisión fue basada en el sufrimiento y la muerte del animal. Espectáculo cruel, fue uno de los términos utilizados para definir las corridas de toros. 

Dato personal: No me gustan las corridas de toros. Básicamente por que no me gusta que las personas, animales o cosas, sufran.  
 
Hoy, leo, que el mismo parlamento, debatirá una ley de regulación de los correbous.
Para el que no lo sepa, los correbous, son una práctica bastante extendida en el sur de Cataluña, Valencia y Aragón (y seguro que me dejo algún sitio). Consiste en atar a un toro, y putearlo. Hay diversas modalidades, como el toro embolado, en el que se acoplan unas teas a las astas del toro, se prenden, y se lo hace corretear alegremente por un cercado, mientras personas con descontrol de testosterona, demuestran sus habilidades circenses. En fin, ¡cultura chicos, cultura!



Toro, preguntándose donde está la salida del Museo

Lo divertido (aquí siempre hay algo divertido), es que por lo visto, algunos parlamentarios como Marta Cid (ERC), en la que diferencia las corridas de los correbous, afirmando que: 
 
"Los correbous, son una práctica con fuerte arraigo donde el toro no sufre." 

Su colega Francesc Sancho (CiU), se arrancó con otra bonita frase:  

"La filosofía es que las tradiciones que sobreviven son las que se adaptan a lo largo del tiempo. La ley intenta evitar cualquier tortura: no se mata al animal, ni se utiliza el estoque ni las banderillas." 

En vista de que la señora Cid y el señor Sancho, también son mamíferos de sangre caliente, y por supuesto catalanes involucrados y comprometidos con la cultura y actividades con fuerte arraigo popular. Propongo que antes de la votación parlamentaria, los aten, les coloquen las teas, y las prendan. Luego, sus colegas parlamentarios podrían hacer suertes saltando al hemiciclo para sortearlos, torearlos y provocarlos (sin estoques ni banderillas, por supuesto. Eso sería cruel). 
Cuando la señora Cid y el señor Sancho, con quemaduras de tercer grado, y ciegos. Digan que ya tienen suficiente tradición con arraigo (el toro no suele tener esa habilidad), que apaguen las teas, y voten.

Creo que es una buena manera de acercar a los políticos a la realidad, y de paso que aprendan a medir las chorradas que dicen… 

Tal y como yo lo veo (una postura intransigente, absolutista, y demagógica), esto es el equivalente a abolir la pena de muerte, para meses después regular la tortura. ¡ViscACatalunya!

13 septiembre 2010

Pavlov

Corría el mes de enero de 1998. 
Juan Pablo II visitaba Cuba, Stoitchkov había vuelto al Barça (no hacía falta Hristo…) y Karembeu fichaba por el Madrid (tampoco hacía falta Christian). El mercado inmobiliario español, bullía en una danza orgiástica de subida de precios, mientras en las radios, Bittersweet symphony de The Verbe, se daba de leches con el Corazón partío de Alejandro Sanz… El final de los 90’s asomaba por la esquina, y en la cartelera de todos los cines, un imberbe Di Caprio se besuqueaba con Kate Winslet (ojo, spoiler) antes de morir congelado en aguas del Atlántico…

Recuerdo perfectamente la primera vez que vi esa película, Titanic… Fue una tarde de viernes, en el cine Boliche de Barcelona. Fui obligado por mi novia de aquel entonces, y opuse la resistencia esperada de un “chico malo que no quiere ver películas románticas”. Tenéis que entenderlo, tenía 17 años y era un grunge en plena tormenta adolescente…

En fin, que dada mi renuencia fui de los últimos en ir a ver la famosa película. El destino, quiso que a mi lado (el lado en el que no estaba mi novia) se sentase una amiga, que había tenido tiempo (y dinero) de ir a ver la película 7 veces al cine. Adoraba todo lo relacionado con Titanic. La trama, la música, los actores (incluso como actuaban esos actores en esa película). En fin, yo creo que hablaba bien incluso de la iluminación, y el tipo de letra elegido para el cartel de la película…

Dramatización

La cosa es que, una vez sentados en nuestras butacas y apagadas las luces, aparecieron las letras de créditos de la película. En aquel preciso instante, y presa de la sugestión, mi amiga (de la cual obviare el nombre), empezó a llorar. Lloró, emulando al perro de Pavlov. Presintiendo el final dramático, melosón y húmedo de Jack Dawson, y los lagrimones corrieron por sus mejillas.

Ayer otra amiga me hizo pensar en que todos tenemos reacciones del tipo; “Perro de Pavlov” en nuestro día a día. Al escuchar el sonido del gas al abrir una lata de refresco, al notar el olor caprichoso del látex, el tintinear de esas llaves en esa puerta, el click del cierre del casco al subir en la moto, o identificar el olor del protector solar con relajarse en una toalla.
Lo curioso, es que desde hace un mes, hay determinadas palabras, que al aparecer en la pantalla de mi teléfono, me hacen salivar y sonreír a la vez. En cuanto leo “La Perla” en un sms, me cuesta no babear. Y desde el jueves pasado, los sms con las palabras “Milano” o “Elephanta” me generan el mismo efecto…

06 septiembre 2010

Suponiendo

Según la RAE (que todo lo sabe, o al menos se atreve a describirlo). 
 
dios
(Del lat. deus).
1. m. Ser supremo que en las religiones monoteístas es considerado hacedor del universo.
ORTOGR. Escr. con may. inicial.
2. m. Deidad a que dan o han dado culto las diversas religiones. 
 
La RAE, en su insondable sabiduría, no se moja en si Dios (o dios, o ¿quién sabe?) existe o no. 
Y es que las aguas andan algo revueltas desde que Stephen Hawking dijo hace unos días, que no es necesario un Dios para la existencia del universo. 
Con este tipo de afirmaciones sucede lo que con Messi. Todos sabemos que “Messi es el mejor jugador del mundo (mundial)”, pero si lo afirmas ante según quién, es posible que (por un ataque de orgullo inconsciente, o un estado etílico preocupante), se atreva a llevarte la contraria. 
 
Mi planteamiento personal al respecto (de Dios, no de Messi, ese está bastante claro), es que Dios es una palabreja que alguien se inventó hace tiempo para describir algo que tampoco sabía explicar, uséase, un resumen. Con lo que, no deja de ser una idea humana. No amigos, Dios no dejó un libro de instrucciones en el que, cual mueble de IKEA, se explica todo. Así que… 
 
Suposición A. Dios, existe. De ser así, no parece que quiera dejar clara su existencia. Es decir, si soy Dios, quiero que se me conozca, y tengo todo ese poder… ¿Por qué mostrarme con parábolas, desastres naturales, o plagas? Me pido un huequito en algún programa de corazón, o ficho por algún club de fútbol, o escribo una saga sobre vampiros, y me doy a conocer… como Dios manda… Entonces… ¿Por qué esa insistencia de las distintas iglesias en darlo a conocer? ¡Parecen paparazzis religiosos! Mi opinión es que Dios, es tímido (en caso de existir).
 
Santo Tomás, buscando evidencias de Dios
 
Suposición B. Dios, no existe. En ese caso, podemos suponer que todo este tema de las religiones, viene de una noche alucinógena en el albor de los tiempos. Ya sabéis, un tipo bebió, le dio por querer llamar la atención; Que si yo conozco a Dios, que si es mi colega, que si es omnipresente… Y ya la tenemos liada, los bulos corren como la pólvora (e imaginad como corrían cuando no tenían tele para entretenerse). De ahí a una guerra santa hay dos “no te creo”.